viernes, 20 de agosto de 2010

Dos princesitas...[!!]

Os voy a contar la historia de dos princesas muy especiales...

            Hace mucho tiempo, en un lugar no tan lejano vivía una princesita rubia, no era tan bella como las demás, aparte como era tan tímida y tenia un carácter un poco fuerte la gente la ignoraba, tan solo le prestaban atención para burlarse de ella, de ser tan diferente a los demás y por eso siempre estaba en un rincón del castillo sola, leyendo... Leia cualquier libro de aventuras o historias de amor, algo que le permitiera soñar y abandonar ese mundo real que tan mal le trataba...
Un día como otro cualquiera mientras esa princesita estaba leyendo uno de sus muchos libros, se le acerco otra princesita del castillo... era una chica morena que llevaba gafas pero guapísima,  se le acerco con una sonrisa en el rostro y se presento, "Hola me llamo Carla y tú?", la princesita rubia le miro confusa y le respondió "Yo me llamo Miriam", Carla le sonrío de nuevo y le dijo "Pues a partir de ahora todos los días te vendrás con nosotras", Miriam indecisa le miro y le dijo que no, que ella prefería seguir leyendo, sin embargo Carla no se dio por vencida y siguió insistiendo, hasta que por fin logro convencer a Miriam de que se fuera con ella. Carla le presento a Miriam las demás princesas y príncipes que habían en el castillo y pasaron los días y se fueron haciendo amigas, cada día esa amistad se iba haciendo más y más fuerte, hasta tal momento que salieron del castillo en busca de aventuras... Pero un día el destino tal como las unió, las quiso separar y se dejaron de ver y de hablar...
Pasaron los años y las princesitas tenían su vida sin saber nada de la otra, ¿se acordarían de lo que vivieron?...
¿¿Carla??- ¿¿Miriam?? Se encontraron en una panadería después de tres años, increíble pero cierto, ese día se encontraron para retomar esa vieja amistad, volvieron a hablar, volvieron a quedar y sin darse cuenta las dos princesitas estaban de nuevo viviendo aventuras, pero lo que no sabían es que el destino les tenia preparada la mayor aventura de todas... Algo que sin duda cambiaria la vida de ambas....
VERANO!! era absolutamente increíble, miles y miles de risas y sonrisas, fotos por todos los lados para recordar esos momentos y lo mejor de todo todavía estaba por llegar...Estaban en un lugar bastante especial para Miriam, allí podía mirar quien ella creía que iba a ser su príncipe ideal, aunque en el fondo sabia que se equivocaba...Sin embargo ella era feliz yendo a ese lugar y mírale aunque fuera a metros de distancia, y Carla estaba ahí para acompañarla y para apoyarla cuando lo necesitaba, entonces sucedió....
Como de la nada, apareció un príncipe realmente encantador, alto, moreno, de ojos marrones y atlético, era el príncipe perfecto con una sonrisa radiante, pero eso no era todo, lo más importante de todo es que ha una de las princesas la vida le iba a cambiar, le iba a hacer sentir y creer en cosas que nunca antes se había imaginado que existía, iba a romper todas sus barreras....¿¿pero sería ella capaz de superar sus miedos por él?? Esa era la pregunta que Miriam se hacia cada vez que miraba a Carla, no lo podía evitar, ese chico había entrado por los ojos de Carla pero se había quedado en su corazón y para siempre.
El verano fue lleno de emociones y los sentimientos estaban a flor de piel y es que no solo a Carla le había cambiado el asunto, si no que Miriam ya no estaba segura de ese príncipe que creía ideal, ahora había otro...un chico alto, alto, que quizás no era el más lindo de todos los príncipes, igual no era tan guapo como su hermano atlético pero tenia algo que Miriam no lograba descubrir pero aún así ella no podía dejar de mirarle, algo de él le llamaba y de que modo...
Los días iban pasando y ellos se marcharon, regresaron a su castillo, que ese si que era de un lugar muy muy lejano...¿Volverían a encontrarse?...El verano se termino y ellos ya no estaban ahí, Miriam tenia una duda enorme en su cabeza y lo peor de todo es que creía que en su corazón también y es que ya no sabia a cual de los dos quería, si al Javier que era el que creía que era el ideal o si a Diego que era al que no podía dejar de mirar ni un segundo...Tan solo tenia una cosa clara y es que el dueño de todos los sueños era Diego, pero es que eso significaba algo? y por otro lado Carla, ella si que estaba echa un lío y es que no entendía como era posible que ese chico de ojos marrones se había podido colar en su corazón de la noche a la mañana, y es que Vicente había pasado de ser algo más que un simple príncipe que jugaba al fútbol con los demás a ser SU príncipe...!! Pero la bonita historia, paso a ser un triste cuento y es que al irse ellos, ellas se separaron y es como si ellos se hubieran llevado el alma de ellas, ya no eran las mismas chicas de siempre, ya no era igual, TODO HABIA CAMBIADO, ellas habían cambiado y ese cambio las llevo a distanciarse de nuevo.... DE TODO a nada...
Paso septiembre....noviembre....diciembre....se veían algunos días pero nada era igual y ellas se cansaron de esperar, ellos no iban a regresar. Las princesitas se separaron del todo y los meses siguieron pasando...Un día de marzo vieron las ventanas de la torre abiertas y la carroza en el portal, las princesas se ilusionaron y volvieron a quedar, ellos estaban hache, habían vuelto y todo podía ser, aún había esperanza de que este triste cuento tuviera un feliz final, pero era una equivocación, no eran los príncipes, tan solo era la reina, su madre y dos princesitas pequeñitas las que habían regresado al lugar, así que esas ilusiones se rompieron como se rompe un bola de cristal cuando se cae al suelo... Echa añicos las princesas se volvieron a separar y los días volvieron a pasar, ya no había ni sueños, ni esperanzas aunque en el fondo Miriam albergaba la pequeña esperanza de que ese verano regresaran porque ya sabia quien era el dueño de su mente y no era Javier, al fin logro descubrir que ese tan solo era un traidor, un manipulador... por la otra parte Carla se había echo a la idea de que ese verano que vivió era un sueño y que nada había sido real, pero ahí estaba Miriam y el destino para hacerle ver que SI sucedió...
Julio, verano... Carla paseando por la calle se lo encuentra de sorpresa, estaba ahí!! SU PRÍNCIPE ESTABA AHI y la estaba mirando!! Había vuelto y le había reconocido!! Se acordaba de ella, sin tardar apenas unos minutos llamo corriendo a Miriam esto lo tenía que saber! Fueron a ese lugar único que unió a todos y si, era él, Vicente estaba ahí, también estaban sus dos hermanas, su madre, su padre y ¿su hermano?, ¿donde estaba el príncipe de Miriam?, ¿donde estaba Diego?...no él no había ido, se había quedado en su castillo, tal vez tenia allá una princesa y era normal que no la quisiera dejar sola, seguro que era bien bonita... bueno al menos estaba el príncipe de Carla, ella SÍ podría tener su final feliz...!!
Las dos princesitas pequeñas se acercaron a Carla y Miriam y se presentaron, la más mayor se llamaba Espe y la otra era Inma. Se acordaron de ellas del año pasado y pasaron los días y se fueron haciendo amigas, se iba a jugar por ahí y compartían cosas, incluso Vicente se acercaba a ellas, era todo casi perfecto, faltaba uno...pero nadie le prestaba atención hasta que un día una de las princesas de ese lugar, una niña pequeña de otro país fue a Carla y a Miriam para decirle porque Espe y su familia no estaban allá. Y les dijo que porque habían ido a buscar a su hermano mayor... Sin darse cuenta a Miriam se le dibujo una sonrisa en el rostro que podría iluminar un callejón, pero no era para menos, al fin su príncipe regresaba... Al cabo de las horas la carroza volvió, Miriam y Carla miraron, bajaron todos menos Diego...no estaba...no había vuelto...estaba claro, el destino no los quería juntar...
Mientras tanto la historia de Carla y Vicente esta un tanto desbordada y es que entre ellos se mete una servidumbre por medio intentando romper una relación que estaba apunto de formarse, a pesar de que la muchacha se insinúa ante Vicente, este muy amablemente le aparta diciéndole que no, que no le interesa, sin embargo el simple echo de que ya hay otra persona por medio hace desistir la idea a Carla de que él sea su príncipe y de que le pueda conquistar, así que disimuladamente se retira e intenta romper sus sueños pero, no, no puede, en el fondo le quiere más de lo que ella esta dispuesta a aceptar, más de lo que creía y es tan fuerte ese sentimiento que quiere luchar y sabe que si lucha ganara.
Días después...
"No puede ser, esta AQUIII, Carla!! ESTA AQUIII!!!" Miriam no podía controlar su entusiasmo y es que Diego si había regresado y estaba ahí, delante de ella, estaba tan nerviosa que apenas se le entendía lo que decía, Carla tan solo podía reírse, pero el momento perfecto fue cuando su madre por la noche le dijo a Miriam, "¿Conoces a mi hijo Diego" y Miriam le dijo "Sí, es el de la camisa negra no?", la madre con una sonrisa asintió y llamo a su hijo... Miriam estaba muerta de vergüenza y en eso que llega Carla, y la madre presenta a Diego y a Miriam, esta hace signo de ir a darle dos besos pero el otro se aparta, así que Miriam se aparta cortada, pero la reina empuja a su hijo para que le diera dos besos a la princesita rubia y automáticamente los mofletes de ella van en aumento y sube de un rosado a un rojo potente y en sus labios se dibuja una sonrisa perfecta.
A los pocos días se tuvieron que marchar y es que se iba de vacaciones pero tenían pensado regresar pronto, tal vez una semana o tal vez dos...pero volver volverían. Las princesas se quedaron en ese jardín con todos sus amigos jugando normal, disimulando sus ansias de volverlos a ver, pero una cosa ya esta clara y es que ambas princesas se han prometido una amistad eterna bajo la luna y las estrellas y aunque ellos en un futuro se marchen, han prometido que ellas no se separaran, no de nuevo, así que ahí siguen las dos princesitas más fuertes que nunca y con ganas de luchar por todo lo que quieren,  y ahora quieren a ellos...
¿Lo conseguirán?

1 comentario:

  1. Oiiiis que bonitoooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo !

    ResponderEliminar